En un mundo en rápida digitalización, los gigantes del comercio electrónico están desafiando a las tiendas físicas, lo que genera espacios vacíos en las ciudades. Para hacer frente a esta situación, es vital un sistema centralizado de venta al por menor compartida, accesible tanto en línea como fuera de línea, que beneficie a los minoristas establecidos y a los centros urbanos. Reutilizamos centros comerciales y grandes almacenes en parte para convertirlos en centros de almacenamiento automatizado de alta densidad que actúen como centros de suministro en un radio de 3 kilómetros, donde mejoramos la seguridad de los ingresos de minoristas y propietarios. Este sistema centrado en el ser humano integra a la perfección el comercio local y en línea, ofreciendo acceso a los bienes las 24 horas del día, los 7 días de la semana. Revitaliza la ciudad, actúa como punto de encuentro y tienda en línea sin cita previa, reduce las necesidades de almacenamiento, las devoluciones, los costes de transporte, las emisiones y la congestión, y fomenta la seguridad del suministro y las experiencias de compra innovadoras para los residentes.
